Una de las situaciones más sumamente incómodas a las que puede someterse el ser humano es mantener el contacto visual con otra persona.
Da igual que sea del mismo sexo que del opuesto, de la misma edad que mayor o más pequeño e incluso tampoco importa si es conocido o desconocido. Mantener la mirada es muy incómodo, pero si no se hace puede resultar sospechoso.
Por eso, inconscientemente establecemos unas reglas que nos hacen saber si una persona es de fiar o si, por el contrario, se trata de alguien excesivamente intimidatorio. Este tiempo varía entre unas personas y otras, pues hay quiénes son de apartar la vista prontito y quiénes deciden aguantarla algunos segundos más. Sin embargo, como con todos los datos numéricos, se puede hacer la media, por lo que un grupo de investigadores ingleses ha llevado a cabo un estudio en el que tratan de averiguar cuánto tiempo se puede mantener la mirada sin que resulte incómodo. Y por ir haciendo un poquito de spoiler os diré que es poco, muy poco.
El difícil reto de mantener la mirada
Estamos hartos de ver en televisión experimentos sociales en los que se hace a dos desconocidos mirarse a los ojos durante un tiempo determinado, tras el cuál la mayoría de ellos acaban dándose el más apasionado de los besos.
Del mismo modo, también existe un juego psicológico durante el que dos personas contestan a treinta y seis preguntas de índole muy variada con el supuesto fin de enamorarse. Además, aunque el estudio inicial no lo contiene, se aconseja que finalmente ambos miembros se miren a los ojos manteniendo la mirada durante cuatro minutos. ¡4 minutos! Si probáis a hacerlo veréis que es una brutalidad y que resulta prácticamente imposible aguantar sin apartar la vista, partirse de risa o buscar cualquier otro método para rebajar la tensión.
¿Cuánto tiempo se puede mantener la mirada sin que sea incómodo?
Como os decía, según un estudio publicado en Royal Society Open Science, éste es un tiempo muy reducido, cuya media se puede medir en base a un experimento sencillo.
Para ello, los investigadores responsables tomaron a 498 estudiantes voluntarios que tuvieron que visualizar un vídeo en el que una persona miraba directamente hacia el espectador, pulsando un botón en el momento en el que comenzaran a sentirse incómodos.
Como cabía esperar, no todos pulsaron el botón en el mismo momento, pero éste no fue el único dato curioso del estudio; ya que, además, también se utilizó un software que permitía analizar movimientos de los ojos normalmente imperceptibles, como la dilatación de las pupilas, comprobando que aquellos que podían mantener la mirada durante más tiempo dilataban sus pupilas mucho más rápido.
Diagnosticar el autismo con la mirada es posible
Diagnosticar el autismo sigue siendo complejo a día de hoy por no tener métodos objetivos, pero dos estudios independientes podrían cambiar esto.
Pero bueno, ya está bien de rollo, vosotros queréis saber cuánto tiempo de media aguantaron la mirada sin que resultase incómodo, ¿verdad? ¡Pues solamente 3’3 segundos! ¿Y en el experimento de las preguntas pretendían que aguantásemos 4 minutos? ¡Eso es tortura!
Y por si no os lo creéis, atentos a este vídeo. La chica está sometida al experimento, pero a mí misma me cuesta aguantarle la mirada. ¿Vosotros podéis?
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