Desde pequeños nos enseñaron que en el espacio los astros se juntan en sistemas solares, con normalmente una estrella en el centro y varios planetas orbitando a su alrededor. Por supuesto, hay excepciones a la regla, como sistemas con dos estrellas, pero lo que ha descubierto un equipo de astrónomos de la Universidad de Hawái es incluso mas raro: un planeta solitario en mitad de la nada.
Con el (difícil de recordar) nombre de PSO J318.5-22, se trata de un gigante gaseoso, pero de “solo” seis veces la masa de Júpiter. De hecho está considerado como uno de los objetos “libres” (que no orbitan alrededor de nada) con menor masa conocida. Esa es una de las razones por las que ha sido tan difícil de encontrar, y de hecho los investigadores hablan de su descubrimiento como “encontrar una aguja en un pajar”.
En teoría tales planetas sin estrella son posibles, pero hasta ahora no se había encontrado un ejemplo tan claro como este. Esa no es su única característica interesante, ya que además de eso es un planeta muy joven, que se formó solo hace 12 millones de años. Por tanto, será usado por los científicos para averiguar mas sobre la formación de planetas gaseosos como Júpiter, y al no tener una estrella que ponga las cosas difíciles con su brillo, podrá ser estudiado con imágenes directas.
Situado a 80 años luz de la Tierra, la imagen de PSO J318.5-22 es la de un planeta solitario con una gran cantidad de secretos, como por ejemplo cómo llegó a quedarse solo. Una posibilidad es que haya sido “disparado” por la gravedad de una estrella de gran masa, un fenómeno que se suele dar con asteroides, y que de hecho se puede usar para ahorrar combustible en la exploración espacial.
Fuente | Universidad de Hawái